Soy la palabra silenciosa
que muere en los labios,
el aborto de un pensamiento
florecido de un suspiro ahogado.
Soy el minuto insensato
que atrae un recuerdo,
que se revuelca en el dolor
y agoniza para sanar.
Soy el intento que murió entre llamas,
el crepúsculo que se apaga y no vuelve,
la luna desinflada y opaca que se oculta
entre nubes oscuras y tormenta eternas.
Soy la sombra de mi propia sombra,
el espacio imperceptible entre los versos
que nunca serán escuchados en alta voz,
el cuaderno sin tinta ni dueño.
Soy el poema triste escrito con lágrimas,
nacido de la pasión entre el amor y el olvido,
narrado entre susurros vestidos de agonía.
El amor sin amante soy yo.
Comment (1)
Qué bonito poema!! Me encanta!! Escribes muy bien!!
Un beso! 🙂